Charlaban de cualquier cosa, arteterapia, figuras de peluche con planteamientos cubistas o cualquier otra cosa. No obstante, eran observados atentamente por una Tecata.
Nadie podría explicar a ciencia cierta qué es o quizá nadie desea hacerlo. Baste decir que viven en las urbes, camuflajeadas de árboles.
Uno de los dos charlantes se sintió observado y volteó hacia arriba. La Tecata desvió rápidamente la mirada aparentando indiferencia, pero la persona ya no se sintió tranquila, sacó su celular y le tomó una foto.
No debió hacerlo, a las Tecatas les disgusta especialmente ser retratadas, por eso se camuflajean de árboles, porque creen que nadie reparará en un árbol más en la ciudad.
Si bien nadie sabría explicar qué es una Tecata, casi cualquiera sabe que son sumamente peligrosas, vengativas, rencorosas.
Yo no quisiera estar en el pellejo del insensato que se atrevió a captar esta imagen, espero que a mí no me pase nada por reproducirla. En todo caso, por ningun motivo diré donde se encuentra este ejemplar.
Gracias a Ixchel, por la foto y por alertarme sobre las Tecatas.
domingo, 7 de junio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
¡Oráles, se ve cabronzona!
Que peligro. dicen que si les convidas una tecate, te pueden llegar a perdonar
Muy buenas las fotos
Que yo sepa ( al menos en michoacan) una tecata es una costra,esa aglomeración de tejido a medio cicatrizar con sangre coagulada que se forma despues de una herida y que los niños gustan de arrancar de las rodillas raspadas y llevarselas a la boca...guacala de perro!
Bueno igual es otra forma de camuflaje que usan estos siniestros seres para controlar nuestros pensamientos a la hora de votar.
Publicar un comentario