sábado, 27 de febrero de 2010

Estaba...

...recién despertado, empapado de esa sensación de desconcierto y vacío que solo se siente cuando está uno en un avión. Lo más parecido a estar en ningun lado. Despegado del mundo, en un punto incierto que además cambia a gran velocidad. Una molécula distante que parece querer irse de este mundo.
Y enmedio de ese sentimiento, abro la cortina de la ventanilla, miro hacia abajo, y encuentro esto:

Si alguna vez tengo tres deseos, uno será ir volando hasta allí.

2 comentarios:

ERRZZU dijo...

De esas situaciones donde uno ya no sabe si esta arriba o abajo.

Ricardo Peláez Goycochea dijo...

...o en medio de un sandwich de aire y tierra