sábado, 12 de septiembre de 2009

Cora-son dos


Se pregunta -y con razón- Isabela si la mano humana habrá intervenido en la construcción de ese corazón espinado de la entrada del 27 de agosto. Yo mismo me lo pregunté en su momento. Es tan perfecto... En el mismo jardín botánico había este otro que parece también una paleta de pintor. Nunca sabremos si hay algun ayudante de la naturaleza construyendo metáforas en los nopales.
pd. No sé si un corazón espináo es mejor que un corazón partío, lo que sí creo es que de tener espinas, es mejor que crezcan para afuera y no para dentro.

1 comentario:

patricio.betteo dijo...

Buena la metáfora... sobre todo la tuya: la de las espinas.